NOVELA SERIALIZADA: EL MISTERIOSO NIÑO DE OJOS RASGADOS. CAPITULO VIII

EL MISTERIOSO NIÑO DE OJOS RASGADOS

CAPITULO VIII

Al día siguiente, no tuvo más remedio que bajar a desayunar, pero no vio al conde por ninguna parte y le extrañó que tampoco a Robert.

Se acercó a la mesa ocupada por la doctora Ferguson y Franc Marc, parecía habían hecho una cierta amistad. - Buenos días, puedo sentarme con vosotros. - Naturalmente, contestó Clara. - Por supuesto dijo Marc, teníamos una conversación interesante y nos interrumpieron. - Sí, el conde quería hablar conmigo, la conversación se alargó, yo estaba cansado, subí a mí habitación a hablar con mi familia y la verdad, ya no bajé. - Pues se perdió el espectáculo, dijo Clara riendo. - ¿No sabía qué había un espectáculo?, Robert no me avisó. -

- El que montaron los japoneses, continuó Marc, yo creía que acostumbrados al saque como están, unas copas de wisqui no les harían daño, terminaron midiendo sus fuerzas y por poco sacan los sables de Samurái. - ¿Qué me dices?, sería divertido. - No lo sabes tú bien, tuvimos que separarlos y no les veo por aquí, estarán durmiendo la mona.-

- Yo creo que será la vergüenza los que los mantenga en su habitación, dijo Clara. - David no pudo contener la risa, no me imagino a personas tan rectas, tan serias y con la fama que tienen de honorables, perder así los papeles. - Pues ya ves amigo, le dijo Marc poniéndole una mano en el hombro, no solo por el amor se pierde la cabeza, también por unas copas de más y con peores consecuencias. -

David, - a Marc y a mí nos interesó mucho su proyecto, pero nos dejó muy intrigados cuándo dijo: que en psicología infantil utilizando nanorobots, podían adaptar sus condiciones para una mayor formación intelectual; - ¿qué quiso decir?. - (Recordó las palabras del conde, nada de explicaciones); miró en todas direcciones pero no le vio por ninguna parte; se sentía molesto, pero tenía que contestar.

- Es un proyecto pionero que estamos llevando a cabo voluntarios dentro de OSEIA, con niños que se han quedado sin familia, esta organización les facilita hogares como en mí caso, que se hacen cargo de su cuidado, su manutención y su educación, procurándoles una vida digna. - Es muy loable por parte de esas familias. - ¿Cómo dice qué se llama la organización?. - OSEIA. - ¿Qué quieren decir sus siglas?, preguntó Marc. - Organización en Seguridad y Experimentación en Inteligencia Artificial; aclaró David. - Un titulo muy sugerente; creía se trataba de una ONG, comentó Clara. - Algo así, contestó David. -

- Entonces, ¿tienen experiencia en nanotecnología?, ¿es algún tipo de experimentación con estos niños sin familia?, me está usted preocupando David. - No Clara, para nada, es todo lo contrario, se estudia el comportamiento de estos niños que, en la mayoría de los casos, han sido rescatados del mar, donde seguramente murieron sus padres, o lo que es peor, de las mafias que los han secuestrado y que esta organización a veces pagando dinero, los devuelven a sus familias y en caso de que no aparezcan, los Servicios Sociales de los países, entre ellos España, los dan a casas de acogida. -

- Pero para eso están las otras ONG, ¿por qué una organización con experiencia en robótica, se plantea tantas molestias?, que colabore económicamente es lógico, ¿pero lo demás?… -

- Le aseguro que no hay nada más, yo tengo a mi cargo, soy el tutor de tres niños que aparecieron en la playa de Málaga; seguramente los bajaron de alguna patera y allí los abandonaron, hubo gente que los encontró y los entregó a Servicios Sociales, ellos les facilitan una familia de acogida. Por mi situación económica tengo tutelados a tres niños y les aseguro que están recibiendo una buena educación, mi esposa y yo no podemos tener familia y ahora gracias a esta organización, la tenemos. -

- Perdone David, pero sabemos por desgracia que, tanto laboratorios, como empresas privadas y puede que también gobiernos, están haciendo experimentos con la nanotecnoligía y la robótica en animales y en seres humanos, especialmente para utilizarlos como armas de guerra y seguramente en muchas cosas más, para de una o de otra manera, dominar el mundo. -

- Sí, yo también creo que se están haciendo experimentos de ese tipo, pero en niños no lo creo, los resultados serían a muy largo plazo. -

- Bueno esperaremos a las explicaciones de los japoneses esta tarde, si es que aparecen. - Los tres se echaron a reír.

La Convención empezó con unos minutos de retraso por la espera a su anfitrión el señor conde don Eufrasio; todos estaban acomodados en su sitio y se dio la palabra a los próximos en el orden del programa, que correspondía a los expertos en robótica, los japoneses Assimoto y su compañero en la agencia ESPAC, Simussi.

Assimoto, empezó su exposición para lo que necesitó la ayuda de Simussi, se levantaron de su asiento y a una señal de Assimoto el escenario se amplió; en uno de los laterales del fondo, surgieron cuatro robots dos masculinos y dos femeninos, y si no fuera, porque todos se imaginaban de lo que se trataba, hubieran pasado por humanos, solo a muy corta distancia, veías que no lo eran y aún así, te sobrecogía el corazón de a dónde nos había llevado la tecnología y lo que nos quedará por ver a la velocidad que se estaban desarrollando los acontecimientos.

En la primera pantalla de televisión, una de las parejas de robots, se colocó en los laterales y un vídeo mostraba la imagen de una sala de operaciones, con todo el instrumental necesario para una intervención y en el centro del mismo, una camilla ocupada por una persona de edad avanzada preparada para la operación que se le iba a realizar.

El robot femenino explicó a los presentes, se trataba de un enfermo de Alzhéimer en fase terminal y que el doctor, (el otro robot), les explicaría como se realizaba en muy pocos minutos sin que el paciente sufriera; una sencilla incisión con una simple hipodérmica en una zona poco sensible del cerebro, implantaría un casi imperceptible nanorobot y haría que el paciente, recuperase en casi un ochenta por ciento su memoria, y conociese por tanto, a las personas que habían estado en su vida: sus afectos, su trabajo y su relación con los demás.

Cuando la intervención terminó y vieron, como aquel hombre parecía despertar de un largo letargo, todo el mundo se levantó de sus asientos y sin poder reprimir su asombro, lo demostraron con un gran y sonoro aplauso. La enfermedad del Alzhéimer es una de las más temibles y de la que se sabe muy poco por qué se origina. Era importante, que la tecnología sirviera para paliar tanto sufrimiento.

Después de esos sonoros aplausos, la gente se sentó y se hizo un gran silencio. La expectación había crecido y esperaban que la siguiente demostración fuera al menos, tan espectacular como la primera.

La segunda pantalla se iluminó y un segundo quirófano apareció, pero en este caso, la persona que ocupaba la camilla, era un niño. Fue el robot femenino el que empezó a explicar el problema que tenía el pequeño; había nacido sin parte del cerebro y su vida por tanto, era muy limitada, controlaba parte del aparato locomotor, pero no podía ver, hablar, ni oír, además de su capacidad para comprender y seguramente sentir, al menos no lo demostraba.

La doctora robot, "así la llamaremos", explicaba como en la vez anterior, que con una aguja hipodérmica provista de aquel minusculo ordenador, que se le podría llamar sin lugar a equivocarnos, el "Bosón de Higgins", o la "partícula de Dios", hacía recuperar los sentidos tan importantes para el ser humano, como son: la vista, el oído, el habla y poder discernir lo que le rodea, comprender la realidad del mundo en el que ha de vivir, en definitiva, volver a nacer.

Cuando terminó la explicación y pasados unos minutos, el niño se incorporó en la camilla y esta vez la gente enmudeció de emoción y había lágrimas en muchos ojos.

Las pantallas se apagaron y los expertos Assimoto y Simussi ocuparon sus puestos; el teatro se venía a bajo con los aplausos, los mismos compañeros les felicitaban dándoles palmadítas en la espalda ante lo que habían presenciado, solo comprensible para mentes privilegiadas como las que allí estaban.

La gente después de los aplausos y de los comentarios de asombro, volvió a sentarse y a guardar silencio.

Las manos empezaron a levantarse pidiendo hacer preguntas; en ese preciso momento, llegó don Eufrasio y pidió disculpas, por no estar al principio de la intervención de los científicos, pero dijo estaba informado de todo lo que allí se había visto y qué, sería él, el que llevase la organización de las preguntas de los periodistas y de las respuestas; recordaba que habría temas y explicaciones, que por estar en fase de investigación, no podrían darse con el rigor de la verdad, ya que seguramente no se conocía todavía, pero serían lo más precisas que fuera posible.

Don Eufrasio, dio la palabra al periodista del Wasintón Post, Henrri Lanz. - He quedado muy impresionado por los vídeos que hemos visto, tendría muchas preguntas, pero comprendo que todos tenemos la misma curiosidad, así que me gustaría que los científicos Assimoto y Simussi, explicasen cómo han llegado a la conclusión, de qué, con la implantación de un nanorobots en el cerebro de una persona con alzheímer en fase terminal, recuperaría la memoria y los afectos de su vida pasada. -

Assimoto tomó la palabra. - Señor Lanz, no es difícil de entender, en el chip de ese nanorobots se han grabado imágenes de su vida: casamientos, nacimiento de sus hijos, compañeros de estudios y de trabajo, padres, amigos, todo lo que su cerebro olvidó y de esta manera no sólo lo recordará, si no qué también los sentimientos fluirán con las imágenes. La informática unida a la nanotecnología, puede por suerte, resolver esa cuestión. -

Georges Man, periodista de la BBC, preguntó si esa técnica se desarrollaría a nivel general en la sanidad de todos los países, especialmente en los europeos.

- Simussi le contestó diciéndo: - que lamentablemente no podía darle esa respuesta, pues eran los gobiernos los que tendrían que hacerse cargo de esa cuestión; solo le diré: que para ese motivo se ha investigado, para qué llegara a la mayor población posible y pudiera beneficiarse de ello, pero también les dijo, que sería muy costoso ponerlo en funcionamiento a gran escala.-

- Entonces George hizo una reflexión que seguramente estaba en la mente de todos; ¿quiere decirnos qué no sólo habrá que esperar a que el plan se quiera llevar a cabo por los gobiernos de los países, si no qué también y cómo siempre, se beneficiaran los que tienen dinero?.-

- Simussi le dijo: lo lamento tanto o más que usted, pero seguramente así será. -

- Pamela Vince periodista del periódico más importante de Francia, preguntó cómo habían logrado restablecer la parte del cerebro que le faltaba al niño, y unir ambas partes, cuándo era muy complicado que la parte original, no creara rechazó al no reconocerla como suya, y a la vez que, ambos hemisferios recuperasen con la implantación del nanorobot, los órganos sensoriales por esta anomalía. -

- Señorita Vince: después de experimentar con el cerebro de muchos animales, los más parecidos al humano, el cerdo, el mono, incluso el delfín; nos decantamos por el de un pequeño mono, que por su tamaño era el más viable; después de muchas pruebas, conseguimos a través del cordón umbilical del niño, fabricar una membrana exactamente igual a la que cubre su cerebro y así logramos que no hubiera rechazo. -

- Las células madre extraídas del cordón umbilical, reconocieron como suyas las que no lo eran y además con la intervención del nanorobot que introdujo toda la información, como en el vídeo anterior, con imágenes, sonidos, olores en este caso de la madre, poco a poco recuperara la visión, el habla, el oído y con ellos recuperados, capaz de conocer y sentir. Es verdad que en los vídeos después de las intervenciones parece que los pacientes se recuperan rápidamente, pero no es así, en los dos casos, pasaron meses para esa recuperación, pero en los vídeos eso no se les podía mostrar, hubiese sido largo, pero el resultado es el que han visto. -

- Yeremi Hans un periodista holandés, preguntó a los expertos las consecuencias que podrían traer estos descubrimientos si caían en malas manos y si estábamos preparados emocionalmente, para asumir, tanto social, cómo política y económicamente estos avances. -

- Clara Ferguson dijo qué ella también se hacia esa misma pregunta, pero no se podía responder, habría que confiar en la responsabilidad de la gente y pedía a los políticos leyes justas para paliar los problemas que pudieran surgir. -

- El presidente de la Convención don Eufrasio, quería cerrar la cuestión cuanto antes, para evitar que ciertas preguntas que no se podían o no se querían responder se formularan, y con mucha diplomacia, tomó la palabra. Me siento muy honrado y satisfecho de haber presidido esta Convención, nuestros expertos científicos, nos han demostrado los avances en las técnicas de la robótica, nanobiología, e inteligencia artificial, así como también en la genética; pero ellos son eso científicos, no tienen responsabilidades políticas, sociales, ni económicas, corresponde a los estados y a sus gobernantes hacer leyes éticas y justas para que todos estos descubrimientos se apliquen a todo el que lo necesite de la manera más esencial y justa.

Por lo tanto, doy por finalizada esta Convención, con la conclusión de que ha sido muy importante para la ciencia y para todo el género humano, espero que todos los asistentes hayan reconocido lo primordial de sus revelaciones.

Gracias a todos por su asistencia.

Les ruego pasen al salón de los Espejos para tomar un ágape como despedida y celebración por la importancia de lo que se ha puesto de manifiesto en estos días. -

Un murmullo generalizado de asombro y de preguntas, surgía según se iba abandonando el salón de actos; algunos con cierto estupor, pensando fríamente había mucho por lo que recapacitar, pues lo que se había visto allí, era todavía incomprensible para muchos.

- David salía junto a Clara Férguson y Marc, a ellos se unieron Simussi y Assimoto comentando lo importante que había sido la Convención, todos coincidía  había superado con creces las expectativas. -

Según iban pasando al salón de los Espejos, el grupo se fue ampliando, muchos periodistas no habían quedado muy convencidos con las explicaciones, pero comprendieron no era el momento de más preguntas y se dejaron llevar por la música de Estraus que se escuchaba en todo el salón.

Los camareros empezaron a llegar con bandejas con copas de champán y demás licores; no hay mejor estímulo para el paladar que apetecibles canapés: de caviar, salmón, diferentes patés y otras exquisiteces, que solo en esos grandes salones se podían degustar, pues no eran asequibles al resto de los mortales; así que el éxito de la Convención había sido positiva en todos los sentidos.

La gente se fue marchando y el grupo formado por David, Clara, Marc, Simussi y Assimoto, charlaban y reían amistosamente sentados en los cómodos sillones próximos a los ventanales y junto a una mesa en la que poder dejar sus copas, con bandejas bien surtidas, a las que nadie parecía hacer ningún caso; estaban en esa conversación animada, cuando llegó don Eufrasio, se sentó con ellos, llamó a un camarero y le pidió una botella de champán y copas limpias.

 

El camarero llegó con el champán y las copas; don Eufrasió se levantó con esa elegancia que le caracterizaba, tomó una copa en la mano y dijo: - "vamos a tomar la última copa y a brindar por el éxito de la Convención y por todos ustedes, espero  lo repitamos muchas veces". -

!Por el éxito ¡ dijo el conde y levantó su copa. - !Por el éxito¡ respondieron todos.